A vivir

Escondido tras una nube negra de abril, en las sombras que la mediocridad impuso a tu vida, ahora ya sabes que no hay nada para ti, que da igual que sigas luchando o que te rindas. Porque nadie te enseña, amigo, a vivir en la rutina, nadie te dice lo complicado que es todo, nadie te explica que no evitarás dejar propina, cuando todo sea oscuridad y lodo. Te han dado la vida, reclaman, delito consentido por la humanidad, por los que un regalo lo llaman.