Se acaba de estrenar la tercera, y última, temporada de una serie distinta, fresca y llena de matices que no te dejará nunca indiferente. Gutiérrez y Alterio forman una pareja bastante sólida en lo interpretativo a la que se unen un espléndido Miguel Rellán y, en la tercera temporada, María Hervás.
Las dos primeras temporadas eran más casi un sketch en cada episodio aunque con cierto hilo narrativo. La tercera es mucho más serie como tal y presenta cinco capítulos hilados hasta que se descubre lo sucedido. Se trata de que el espectador sienta vergüenza ajena, que se enfrente a sus miedos y que piense si la vida que lleva está, o no, a la altura de las circunstancias.
Así las cosas, todo parece indicar que nos encontramos ante uno de esos casos en los que la serie irá creciendo progresivamente hasta convertirse en imprescindible. De ti depende perdértela o no, pero te recomendamos que no dejes de verla ya que te encontrarás con un trabajo tan perfecto como ideal para que comiences a pensar.
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